Comunicado de prensa: La Familia Misionera de Nuestra Señora aporta precisiones

Saint Pierre de Colombier: La Familia Misionera de Nuestra Señora aporta precisiones

A raíz de los acontecimientos que han tenido lugar estos últimos días en Saint Pierre de Colombier, la Familia Misionera de Nuestra Señora desea proporcionar algunas informaciones para facilitar comprensión de la situación.

Las obras de construcción del edificio de acogida en el emplazamiento de Nuestra Señora de la Nieves se reanudaron el lunes 9 de octubre, con todas las autorizaciones necesarias, tal y como confirma un comunicado de prensa de la prefectura publicado el miércoles 18 de octubre, en el que se indica que "por el momento, nada impide la continuación de las obras".

El jueves 12 de octubre, los activistas invadieron las obras y dos personas se encadenaron a una excavadora en un intento de utilizar la violencia para bloquear la continuación de las obras.

Ante la amenaza de que esto volviera a ocurrir, muchos miembros de la Comunidad quisieron estar en el lugar el lunes 16 de octubre para impedir que volviera a suceder y proteger a los trabajadores y la maquinaria de otra intrusión violenta e ilegal en este emplazamiento privado. Sin embargo, los activistas ecologistas destruyeron y volcaron las vallas que rodean el sitio, e hicieron otro intento violento para neutralizar la maquinaria. Las imágenes son condenatorias. Los hermanos y hermanas intentaron intervenir, pero se les derribó brutalmente. No obstante, pudieron apoderarse de las herramientas con las que los activistas se encadenaron a las máquinas. Uno de los hermanos resultó herido en una caída y fue trasladado al hospital con un esguince de tobillo. Como la policía no intervino para evacuar a los opositores ilegales, los hermanos permanecieron todo el día alrededor de las máquinas, rezando pacíficamente por todos...

Al día siguiente, martes 17 de octubre, la policía intentó impedir otra intrusión violenta, pero los militantes ecologistas volvieron a destruir las vallas e invadieron el sitio. Los hermanos y hermanas rodearon pacificamente a los militantes y siguieron rezando. Cuando la maquinaria se puso de nuevo en marcha, los militantes volvieron a romper violentamente la linea de la policía y de los religiosos y neutralizaron el lugar, en presencia de un alguacil jurado que levantó acta.

La Familia Misionera de Nuestra Señora reza por quienes se oponen a su proyecto. Pide que se respete la ley y que se apliquen las autorizaciones concedidas por el Estado y confirmadas en varias ocasiones por los tribunales administrativos.

Sus miembros no han cometido ningún acto de violencia; se han interpuesto ante acciones violentas e ilegales, y se han esforzado por hacer que se respeten sus derechos, cuales estaban siendo violados en su domicilio. De todo corazón, expresan su agradecimiento a sus familiares y amigos que en estos momentos les están apoyando en gran número, llegando mensajes de todo el mundo para apoyarles.

La Familia Misionera de Notre Dame renueva su confianza en los empresarios, y pide también en su nombre que el trabajo se reanude lo antes posible y con total seguridad.

Ella recuerda las hermosas palabras del salmo: "El amor y la verdad se encuentran, la justicia y la paz se abrazan". La Comunidad reitera asimismo su oposición a toda violencia y reza por sus oponentes, al tiempo que pide con firmeza que se respeten sus derechos de acuerdo con las leyes del Estado.

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